1955 - 16 de septiembre - 2000

El Consejo de Distrito recuerda esta fecha en la que se inició el movimiento militar que derrocaría el Gobierno que democráticamente el Pueblo Argentino había elegido para conducir sus destinos, presidido por el General JUAN DOMINGO PERON.

Y la recordamos porque, en medio de tantas loas y "defensa" de la democracia, las jóvenes generaciones deben saber:

 Que en la llamada "Revolución Libertadora" participaron muchos de los que hoy se llenan la boca con la palabra democracia.

 Que en la "Junta Consultiva" participaron civiles que pertenecían a TODOS los partidos políticos e ideologías antes incompatibles o enemigas.

 Que esa asonada militar estuvo impregnada de un profundo odio de la oligarquía y de algunos sectores medios de entonces, que veían cómo los hijos de los trabajadores estudiaban en las mismas universidades que sus hijos, y que en sus vacaciones se encontraban con sus obreros y empleados en los lugares que antes eran de su exclusivo privilegio.

 Que, tan profundo fue el odio de estos personajes, que por Decreto 4161 se prohibió utilizar los símbolos del Peronismo. Inclusive silbar la Marcha Peronista, por lo que mucho fueron a parar a los calabozos.

 Que las "Comisiones Investigadoras" confeccionaban arteramente las listas de los empleados de los poderes públicos que por su afiliación partidaria fueron dejados cesantes (en Trenque Lauquen funcionó una de las más feroces).

 Que aquel golpe militar generó una clase de políticos llamada "gorilas", dando la sensación que todavía algunas crías andan sueltas y que han colaborado desde puestos de gobierno nacional, provincial y municipal.

Que ese golpe de estado iniciaba un período de represión sangrienta, que dividió por más de veinte años a los argentinos, postergando las legítimas aspiraciones de vivir en libertad, con proscripciones y prohibiciones de toda natuaraleza.

 Que fue el hecho más desgraciado que interrumpió el definitivo despegue de una País que buscaba su destino de grandeza como Nación, donde los trabajadores, los ancianos, las mujeres y los niños tenían garantizados sus derechos constitucionales en un amplio marco de JUSTICIA SOCIAL.

 Finalmente, rendimos nuestro homenaje a todos lo que fueron asesinados, torturados y prisioneros por aquel régimen despótico que sumió en el dolor y en el luto a millones de argentinos.

 Trenque Lauquen, 16 de setiembre de 2000.